Guerra de Ucrania en cifras: el 80% de la población está directamente afectada

ACN.- Los ucranianos viven traumatizados después de dos años de guerra a gran escala, pero 10 años de guerra en la región del Donbás. Desde que en febrero de 2022 Rusia invadiese Ucrania, son miles los muertos y desparecidos, y miles más los que han tenido que huir de sus hogares, así como las familias rotas que tienen que hacer frente al día a día con muchos de sus seres queridos muertos o heridos. ¿Hasta donde alcanzan las graves consecuencias de este conflicto y la envergadura de los traumas de la guerra? Las familias en Ucrania viven una tortura constante.

La guerra en Ucrania ha provocado ya la mayor crisis de refugiados en el continente europeo desde la Segunda Guerra Mundial:​ más de 6,3 millones de ucranianos han abandonado el país y más de 5 millones son desplazados internos. De las personas que se han quedado en el país, viviendo en sus casas o desplazados en otras localidades, el 40% depende de ayuda humanitaria para sobrevivir, según datos de Naciones Unidas.

Estas personas hacen frente a un día a día nada fácil, atravesando una profunda crisis social y económica, incluso en regiones del país donde la guerra apenas a golpeado con toda su fuerza. Pero ya antes de la escalada bélica, Ucrania tenía un bajísimo nivel de vida, donde el sueldo mínimo era 216 euros y se consideraba como el país más pobre de Europa.

En 2022, el 60% de la infraestructura eléctrica de Ucrania quedó destruida por la guerra y se estima que el 75% de los ucranianos dependen de generadores para poder obtener electricidad y calefacción. Las consecuencias económicas de la guerra se han dejado notar en todo el mundo, con un alza de los precios de los combustibles y de alimentos básicos como el cereal, del que Ucrania era uno de los mayores productores del mundo.

En cuanto al ámbito de la salud, desde el inicio de la invasión rusa, la Organización Mundial de la Salud OMS ha verificado más de 1.300 ataques a centros de salud en Ucrania, esto es más del 55% de todos los ataques en el mundo durante el mismo periodo. Además, desde comienzos de septiembre de 2023, el organismo también documentó la muerte de 111 trabajadores de salud y pacientes, al tiempo que 13 centros de atención médica han sido afectados por los ataques en el mismo periodo de tiempo. La misma institución, aseguró a principios de 2023, que casi un tercio de la población ucraniana sufre problemas mentales.

Y a todo esto, los ataques continúan. El 27 de diciembre de 2023, se produjeron los peores ataques contra Ucrania desde el comienzo de la invasión. Rusia lanzó un bombardeo generalizado contra varias ciudades por todo el país, que se saldó con 30 muertos y más de un centenar de heridos. Rusia «utilizó casi todo tipo de armas de su arsenal» que dirigió a viviendas y un hospital de maternidad, afirmó el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky.

Kiev no fue el único blanco de los ataques. Las autoridades afirmaron que más de 10 drones Shahed de fabricación iraní y 15 misiles se dirigieron a la ciudad occidental de Leópolis, un lugar que hasta ahora se había librado de lo peor de la invasión.

La Iglesia católica ucraniana trata de acompañar a los más necesitados y pide ayuda para socorrerles en sus necesidades espirituales y en sus duras heridas psicológicas, por los traumas de la guerra. Según fuentes de la Iglesia católica ucraniana, el 80% de la población se ha visto afectada directamente por este conflicto. Por ello Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) les quiere apoyar con la campaña “Ucrania. No quiero olvidarte”.

Los católicos ucranianos son apenas el 10% de la población, la mayoría de ellos pertenece a la Iglesia greco-católica de rito bizantino y cuyo líder es el arzobispo mayor de Kiev Mons. Sviatoslav Shevchuk. “Si dejáis de hablar de nosotros dejaremos de existir”, ha comentado este prelado, además de agradecer el apoyo de ACN para la sanación de traumas, la ayuda a religiosas que están acogiendo a desplazados en sus conventos, la ayuda de subsistencia para sacerdotes y promover la oración por la paz entre todos los católicos en el mundo.

Descubre la campaña de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), «Ucrania. No quiero olvidarte», que busca apoyar a la Iglesia católica ucraniana en su misión de sanar traumas y proporcionar ayuda espiritual y material. Únete a la iniciativa para recordar y brindar apoyo a los afectados por la guerra en Ucrania.