Los niños del mundo volverán a unirse en oración por la paz

ACN.- Una vez más, los niños de todo el mundo están invitados a participar en la iniciativa anual “Un millón de niños rezando el Rosario”, organizada por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) durante la primera semana de octubre.

Este es el vigésimo año consecutivo de la campaña, que arrancó en 2005 como un pequeño acto en Venezuela. En 2023, por primera vez, más de un millón de niños participaron oficialmente, y lo mismo ocurrió en 2024.

Para ello, ahora se está llamando a parroquias, movimientos, escuelas y familias a que recen durante la primera semana de octubre y, especialmente, el 7 de octubre -la fiesta de Nuestra Señora del Rosario-, para desencadenar “una marea de oraciones en el mundo entero surgidas del corazón de los niños y hechas con confianza infantil”, según el P. Anton Lässer, asistente eclesiástico de ACN International.

El presidente internacional de ACN, cardenal Mauro Piacenza, destaca la importancia de la campaña de este año, afirmando que “responde al anhelo cada vez más acuciante de paz y unidad en un mundo herido por la división, los conflictos y el sufrimiento”.

“En una época en la que el silencio de la oración se ve a menudo ahogado por el ruido del mundo, el Rosario ofrece un oasis de contemplación. No es una práctica árida ni repetitiva, sino un camino suave y vigoroso que nos lleva al corazón del Evangelio”.

El cardenal nos invita a todos a participar con nuestros hijos “dondequiera que sea posible, para abrazar al mundo entero con esta corona de luz. Recemos juntos para que se fortalezcan los lazos de la comunión eclesial, tanto afectivos como efectivos, y para que el Espíritu Santo despierte en los corazones de los jóvenes un sincero deseo de santidad”.

La inspiración para esta iniciativa proviene de una frase atribuida al místico y santo Padre Pío: “Cuando un millón de niños recen el rosario, el mundo cambiará”. El padre Anton Lässer subraya que “la oración de los niños tiene un poder especial ante Dios, un poder que puede derribar muros, curar heridas y llevar la luz a la oscuridad”.

“El Santo Rosario es y será siempre un camino probado y fiable de esperanza en la paz, un camino que actualmente recorremos con gran fe, sobre todo en este Año Jubilar de la Esperanza de la Iglesia”, escribe el sacerdote.

Aunque todo el mundo pueda participar libremente rezando en el día designado, se ruega a los grupos que se inscriban en la página web oficial para que ACN pueda tener una idea de cuántos niños participan oficialmente en el evento. La página web cuenta, además, con varios recursos útiles en diferentes idiomas que se pueden descargar.