Reconstrucción de la escuela y convento de las dominicas de Batnaya, Irak. ¡Ayúdales!

Construcción y reconstrucción de iglesias
Ayuda aprobada: 465.000€
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Ref. Proyecto: ID 119/00410, 19/00382, 18/00369, 19/00409

› En Batnaya (Irak) la situación hoy todavía es  bastante desoladora

Hacia el final de la ocupación de Batnaya por parte de Daesh, el grupo terrorista utilizó la ciudad como primera línea mientras bombardeaba a las tropas kurdas en Telleskuf. Por esta razón, Batnaya está más dañada que otras ciudades cristianas en la Llanura de Nínive, lo que provoca que una proporción sustancialmente mayor de hogares haya quedado totalmente destruidos.

Fue liberada el 6 de octubre de 2016 por los kurdos Peshmerga. En mayo de 2019 regresaron diez familias; para agosto de 2019, esta cifra había aumentado a 20 familias.

Aunque esto solo constituye una pequeña fracción de la población total de Batnaya, el párroco es optimista y cree que cientos de cristianos regresarán pronto. Se está trabajando para reparar el suministro eléctrico y de agua; una escuela y una clínica del gobierno están terminadas y listas para reanudar su actividad.

› La misión educadora de las hermanas Dominicas está en peligro

El jardín de infancia dominicano en Batnaya, atendido en el pasado por las hermanas del cercano Convento de Santa Oraha, fue construido en 2010 y tenía 124 niños registrados antes de la ocupación de Daesh. El primer piso constaba de aula, oficina, cocina, salón de reuniones y comedor. El segundo piso constaba de tres aulas y un pasillo; este último se utilizó como zona de juegos en invierno.

Lamentablemente, fue bombardeado y completamente destruido, probablemente por un ataque aéreo de la coalición.

A las hermanas les gustaría reconstruirlo para recibir a las familias que probablemente llegarán en los próximos meses a Batnaya.

Las Hermanas Dominicas de Santa Catalina de Siena han estado presentes en Irak desde hace varias décadas. Han sido siempre conocidas por su red de escuelas y jardines de infancia de alta calidad. Sus instalaciones educativas a menudo sirven también a estudiantes no cristianos, como su escuela en Bagdad, que acoge a una gran población musulmana. Durante la ocupación de Daesh, las hermanas desempeñaron un papel importante en la atención de los desplazados internos, la apertura de clínicas y escuelas y el suministro de alimentos.

Las Hermanas Dominicas de Santa Catalina de Siena también dirigen un orfanato en Qaraqosh al que hemos ayudado anteriormente.

› La misión de las hermanas Dominicas no se puede lograr sin un hogar en el que puedan vivir

El convento de las Hermanas Dominicas en Batnaya fue inaugurado en 1907 y tenía como misión:

  • Acoger y visitar a personas y escucharlas
  • Trabajar con laicos dominicanos y realizar actividades espirituales y sociales
  • Preparar a los niños para la Primera Comunión
  • Impartir clases de catecismo
  • Rezar todos los sábados con la gente
  • Compartir el Evangelio con las familias

La propiedad no siempre estuvo en manos de los dominicos. Anteriormente la Iglesia católica caldea la tenía como Mar Oraha o Monasterio de San Abraham. Probablemente fue construido en el siglo VI por monjes de la Iglesia de Oriente, antes de pasar a los caldeos en 1719.

Fue reconstruido en 1921 para tener 12 habitaciones: una capilla, dos salones, comedor, cocina y siete dormitorios. Había tres hermanas antes de la ocupación de Daesh, y se prevé que un número similar regresará después de la reconstrucción. El edificio será más pequeño puesto que acogerá a un número menor de hermanas de las que había en la etapa anterior.

Al igual que la escuela, el convento fue bombardeado y completamente destruido, debido a un ataque aéreo. La presencia de las hermanas y el apoyo a los niños y a las familias es vital para el regreso de los cristianos a sus hogares.

La ciudad de Batnaya es una ciudad asiria en el norte de Irak, a 14 kilómetros de Mosul. Justo antes de la ocupación de Daesh, era el hogar de alrededor de 6.000 habitantes, casi todos católicos caldeos. Este gran aumento de su población en poco menos de dos décadas puede atribuirse al desplazamiento de católicos caldeos de otras partes de Irak.

La presencia de las hermanas y el apoyo a los niños y las familias es vital para el regreso de los cristianos a sus hogares.

La misión de estas hermanas genera un gran cambio y da esperanza a los cristianos de Irak. ¡Tú puedes ayudarles!

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