P. José Essindi: La Iglesia promueve el diálogo y la hermandad de los pueblos de Camerún

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ACN.- En «Perseguidos, pero no olvidados» de la fundación pontificia en Trece televisión mantuvo una entrevista con el sacerdote camerunés José Essindi. Sobre la violencia el padre José comento que: “Boko Haram ha perdido fuerza y que ahora lo ataques son al azar. Todos los que se pronuncian contra ellos contra su ideología se convierten en enemigos”.

Puentes para el diálogo

Además, se ha referido a los conflictos en la región anglófona donde la Iglesia es mediadora, promueve el diálogo y la hermandad de los pueblos. Asimismo, el sacerdote ha reconocido que Iglesia en Camerún “necesita un proyecto en común y mayor coordinación y sintonía a nivel nacional”.

“La iglesia está allí buscando esa zona media para favorecer el diálogo para facilitar la paz”. Habitualmente se ataca a personalidades religiosas por motivos políticos la violencia se ha intensificado con las divisiones religiosas fomentando la desconfianza hacia la autoridad religiosa tradiciones dentro de la comunidad islámica entre los sufíes y wahabíes, incremento de grupos armados. “La fe en Camerún es increíble sigue muy activa y muy viva, especialmente de las zonas del centro y del sur es una aportación de cada uno, mucho dinamismo por los grupos, la fe de los cameruneses también es una fe que ha sido concretizada con gestos concretos”.

Según el reciente Informe de Libertad Religiosa 2021 señala que: en las regiones anglófonas, la situación se ha deteriorado en los últimos años. Las disputadas elecciones presidenciales de octubre de 2018, en las que muchos votantes de las Regiones del Noroeste y Sudoeste no pudieron emitir su voto, han exacerbado las tensiones.

La violencia en estas regiones ha acabado con la vida de unas 3000 personas, tanto civiles como miembros del ejército, y ha desplazado a casi 700 000 desde 2016. La inseguridad ha tenido como resultado la muerte violenta de varios ministros y sacerdotes. La Iglesia católica ha representado un papel muy activo en la promoción del diálogo y la reconciliación entre los separatistas y el Gobierno, pero, a pesar de ello, ambas partes acusan a la Iglesia de tomar partido.