3 meses del terremoto en Siria. «Hay gente que sigue fuera de su casa»

ACN.- Este 6 de mayo se cumplen 3 meses del terremoto en Siria y Turquía. Ayuda a la Iglesia Necesitada mantiene un programa de cooperación con la Iglesia de Alepo, una de las zonas más afectadas, con el cual se cubren los gastos de alquiler temporal de las familias cuyas casas han quedado totalmente destruidas. A propósito de estos casi 90 días desde que ocurrió el seísmo, en Perseguidos pero no Olvidados de Radio María hemos entrevistado a Mons. Jean Abdo Arbach, arzobispo de Homs sobre cómo es la situación actualmente para los afectados por esta catástrofe.

¿Cuál es el panorama actualmente de Siria después del terremoto?
La situación actual después del terremoto no es fácil. Yo, como obispo de Homs, visité Alepo, Lattakia, Tartus, Jabieh, y toda la Costa Negra de Siria. Tenemos casi en cada ciudad, entre 600 y 700 edificios destruidos totalmente, entre ellos también hay casas. Hay gente que hasta ahora está fuera de su casa, hay gente que vive en los alojamientos que el gobierno ha hecho para ellos, sobre todo en las escuelas y en las Iglesias. Hay mucho miedo, porque aún se sienten pequeñas réplicas. La gente no duerme en su casa por este miedo desde hace un mes hasta ahora.

En su archidiócesis de Homs no ha habido que lamentar muchos daños por el terremoto pero seguro que esta emergencia ha afectado de otras formas, ¿cómo estáis apoyando a las víctimas de este terremoto?
Al lado de Homs, se encuentra la provincia de Hama, que es de mi diócesis. El terremoto afectó a Hama; hubo casas destruidas, hubo muertos, casi cincuenta y cinco fallecidos, hubo también muchas familias que dejaron sus casas y se fueron a otros pueblos. En mi diócesis de Homs, hemos recibido mucha gente de Alepo. Hasta ahora, tenemos muchas personas acogidas. Hay gente que necesita ayuda para vivir: necesitan alimentos, medicinas, productos de limpieza. Gracias a Dios, ACN ha enviado ayuda.

¿Cómo han celebrado la Semana Santa y la Pascua en medio de esta situación?
Durante la Cuaresma en nuestra diócesis y en toda Siria hemos tenido cada día un tiempo de oración y la gente ha acudido a rezar. Todos los viernes rezamos una oración a la Virgen María. Es una oración del siglo IV de un santo muy grande de Homs llamado Romano. Durante la Semana Santa hubo muchos fieles que participaban en la liturgia dentro y fuera de las iglesias. Sentimos la fe en nuestra gente y sentimos también que tienen una necesidad espiritual muy grande de vivir con Jesús resucitado. En nuestras oraciones durante la Semana Santa y durante la Pascua pedimos a Jesús resucitado lo mismo que Él dijo a sus discípulos: pedimos que nos de la paz. La paz a nuestro país, a nuestras familias, a nuestra gente; también a todo el mundo, sobre todo la paz en el mundo.

¿Cuáles son hoy las necesidades más importantes de la Iglesia en Siria?
En estos momentos difíciles son muchas las necesidades de la Iglesia en Siria. En primer lugar, por la guerra que nos afectó mucho en estos largos años, y también la crisis del Líbano. Tenemos ahora un 80% de pobreza en nuestra población cristiana. Por eso hay mucha gente, muchas familias cristianas quieren dejar Siria para vivir en otro lado. Para nosotros no es fácil. Se necesita apoyar a esas familias con proyectos eficaces, por ejemplo, proyectos de agricultura que les permita vivir en los pueblos de una manera digna. Otras ayudas son para los jóvenes para que puedan asistir a la universidad y continuar sus estudios. Luego para la mayoría de la gente se necesitan medicamentos y comida.

El programa de cooperación de Ayuda a la Iglesia Necesitada junto al Comité Conjunto de la Iglesia de Alepo proporciona ayudas para el alquiler temporal de unas 430 familias afectadas por el terremoto. La prioridad según ha explicado Xavier Bisits, responsable de proyectos para Siria, es que las familias puedan vivir temporalmente en lugares dignos. En una segunda etapa, ACN prevé la reparación de los daños a las viviendas para lo cual ya ha puesto en marcha un estudio previo.